viernes, 13 de diciembre de 2013

Buenas noches esta tarde trece.

Me prometí a mi misma que no volvería a escribir un día 13.
No por supersticiones,
si no ya por recuerdos.
Recuerdos buenos, con gente mala.
O
recuerdos malos, con gente buena.
No lo sé.
Lo que sí sé es que han cambiado demasiadas cosas, y han pasado otras tantas, buenas... y malas..., desde entonces.
Más malas que buenas.
Perderte alrededor de unas 800 veces, está en la lista de cosas malas aunque me digan que debe ir en la contraria.
Prometí no escribir en 13 por lo mal que me siento, pero es esa misma sensación la que me hace escribir, y alfinal no sé ni cómo acabo,
no sé si es mejor o peor.
Sé que te sigo queriendo después de cada 12... ya ocho.
Después de cada 13... ya dos.
Después de cada cosa, buena o mala.
Después de cada ella o yo, en el que siempre era la derrotada.
Después de cada tú o él, en el que siempre salías victorioso.
Después de cada palabra dolorosa o ilusión perdida,
cada sonrisa,
cada mirada,
cada 'tonta'.
Después de cada todo,
lo sigues siendo.

Reflexión en el horizonte de tus pupilas

Cuando te busco alfinal siempre me encuentras tú.
Y ahora,
ni una ni otra,
ni otra ni una.
Me doy por vencida diciendo que sí que te he perdido
del todo,
otra vez.
Y si es quizá ya para siempre...
Soy ceniza sin tu mirada
color cielo engañando
a cada chocolatina que se come esa boca
(que tantos besos me dio...)
Reflejos en tus pupilas.
Y nos volvemos a encontrar,
y volvemos a mirarnos,
tú,
sigues siendo el mismo...
yo ya no soy la de antes.
Y en mis ojos,
al verte,
se refleja la misma
puta perfección
de cuando te miras en el espejo.

miércoles, 13 de noviembre de 2013

¿Sabes cuano tienes esa sensación en el pecho y necesitas escribir mucho mucho?
Pero sin embargo, aun asi, escribir cuesta, duele más que nada...
Quieres escribir, pero no puedes, y no sabes por qué, pero aún así escribes, por sacar la mierda de dentro, por saber que es lo que quieres, porque no lo sabes, desde hace unas semanas no lo sabes, todo ha cambiado tanto, que lo unico que tienes en claro es
el por que ese estres, esas ganas de escribir,
el por quien.
Salir corriendo de casa siempre, hacia todos lados, donde sea,
por el por si acaso.
Por la casualidad.
Por vivir un poquito antes de morir de nuevo cada noche al acostarme pensando un dia mas, que vaya pena la vida mientras seas gilipollas.
Estaria genial que cierta gente abriera los ojos, de vez en cuando y para siempre.

sábado, 21 de septiembre de 2013

-No me has olvidado.
-Porque tú lo digas, creído.
-Es lo que creo, es la verdad, y es lo que dice todo el mundo.
-Ese es tu problema, que siempre te has guiado más por lo que te ha dicho la gente que lo que te he dicho yo. La gente no sabe una mierda de nada... pero ésta vez tienen razón.

Cuando ni la música te salva, ¿quién lo hace?

Cuando viene el frío y no estás.
O simplemente cuando vienen los recuerdos porque tú te has ido.
Cuando al final del armario veo una sudadera roja, que.. bueno.
      Y pongo la música y es tu canción.
Cuando simplemente me siento mal y estoy deseando escuchar música para salvarme, para salir de ese agujero negro.. pero, qué hacer.. cuando ni la música me salva.
Y solo deseo que alguien me rescate,
                                                      pero quiero que me salve, quien no puede, y claro...
                                                                                                                         me hundo más,
                                                                            y parecía imposible poder hundirse más.
Parecemos tontos escuchando canciones tristes cuando estamos mal,
pero lo hacemos por escuchar y pensar que hay gente peor que nosotros, y aunque en parte eso no es bueno, nos sube algo la moral... pero, ¿y si estoy peor que todas las canciones de pena del mundo? o simplemente me siento así.
No hay quien me salve, y solo necesito eso,
                                                              o solo le necesito a él.
Que perfecto sería volver a tenerte aquí.
Cerquita.
Al lado.
Riéndote de mi, pero conmigo, de esa forma tan tuya.

Bonito es ver como sueño despierta cosas tan imposibles.
En realidad no es bonito,
                                     es una mierda.
Dejad de decir que no hay imposibles, porque sí los hay.
O al menos eso pensaré hasta que él vuelva.
                                               


                                                                                                                                         8.10.

martes, 10 de septiembre de 2013

Me gustaría volver a querer, 
                           a quererte, 
como cada tarde,
como en cada silla,
como en cada suelo, 
          en cada calle.

De una manera o de otra no se olvida, porque es imposible que una persona conscientemente sabiendo lo que hace, olvide por completo a alguien.
La cosa es olvidar que quieres a esa persona.
Eso se consigue.
La parte buena, es que nunca me quisiste, entonces no puedes olvidar que me quieres.
Espero sinceramente, que no me entendáis.
Y sé, que de una forma o de otra, no podrás olvidarme, porque me odias, o porque simplemente me recuerdas como algo del pasado.
Y por eso mismo digo que nunca se olvida a alguien completamente.

[Lo mío es decir gilipolleces sin sentido, que para mi sí lo tiene, cosas que solo entiendo yo... en parte es bueno que no me entendáis.]
-¿Cómo estás?
-Pues... respiro y sigo viva, así que, supongo que bien...

I need your love



Necesito tu amor, necesito tu tiempo.
Cuando todo va mal, tú lo solucionas.
Me siento tan arriba que cobro vida.
Necesito ser libre contigo ésta noche.
Necesito tu amor.

Respiro hondo cada vez que paso por tu puerta, sé que estás ahí pero no puedo verte más.
Y esa es la razón por la que estás en la oscuridad.
He sido una desconocida desde que nos separamos.
Y me siento tan indefensa aquí.
Mira mis ojos están llenos de miedo.
Dime, ¿tú sientes lo mismo?
Sosténme en tus brazos otra vez...
Necesito tu amor, necesito tu tiempo.
Cuando todo va mal, tú lo solucionas.
Me siento tan arriba que cobro vida.
Necesito ser libre contigo ésta noche.
Necesito tu amor.

Ahora estoy soñando, ¿alguna vez te encontraré?
Camino en círculos, y nunca resolveré lo que significo para ti, ¿encajamos?
Intento pelear por esto, pero sé que no soy tan fuerte.
Y me siento tan indefensa aquí.
Mira mis ojos están llenos de miedo.
Dime, ¿tú sientes lo mismo?
Sosténme en tus brazos otra vez...
Necesito tu amor, necesito tu tiempo.
Cuando todo va mal, tú lo solucionas.
Me siento tan arriba que cobro vida.
Necesito ser libre contigo ésta noche.
Necesito tu amor.

Todos los años, todas las veces, tú nunca has tenido la culpa.
Y ahora mis ojos están abiertos, y mi corazón se está cerrando.
Todas las lágrimas, todas las mentiras, todo el desperdicio... 
he estado intentando hacer un cambio..
Y ahora mis ojos están abiertos.
Necesito tu amor, necesito tu tiempo.
Cuando todo va mal, tú lo solucionas.
Me siento tan arriba que cobro vida.
Necesito ser libre.
<<La persona a la que mas he querido no es la que más recuerdos me ha dejado, ni la que más me ha marcado, es raro de explicar, bueno, es inexplicable...>>
Cada persona marca de una manera, unas de más y otras de menos. Algunas a iguales, pero de distinta forma, no me sé explicar con respecto a hablar de está cierta persona que no es ni por asomo de la que siempre escribo.

lunes, 9 de septiembre de 2013

(Re) construyendo - me

Hay veces, en las que lo mejor es dejar atrás lo que pertenece al pasado, y seguir hacía delante con el presente al futuro. No podemos obligar a ninguna partícula del pasado a pertenecer a nosotros como presente si no pertenece a nuestro destino. Algo que se aprende después de muchas hostias bien dadas contra el suelo y por una puta piedra del camino. Debes quitarte la venda y ver el suelo, porque si no ves por donde andas como no vas a caer... Echamos de menos a las cosas del pasado, como pensando que volverán, esperando que vuelvan, sin pensar, que si se han quedado atrás, es por algo.
Nos aferramos a las cosas o a las personas como si nos pertenecieran, y no nos damos cuenta de que estamos equivocados. A nosotros mismos lo único que nos pertenece totalmente es nuestro camino, de lo único que debemos estar responsabilizados.
¿Por qué cuando estamos mal por amor o alguna chorrada de esas, decimos que es por alguien? No, no es por alguien, esa persona no está responsabilizada de tu cambio de humor, de tu vida en sí. Estamos mal por nosotros mismos, porque queremos algo que no podemos tener, porque nuestro corazón o cerebro es demasiado masoquista o gilipollas.
La otra persona no tiene culpa de que nosotros no abramos los ojos, no nos quitemos la venda o no paremos de caer siempre en la misma piedra del mismo camino, con los mismos recuerdos clavados en los pies como cristales.
Siempre que he querido olvidar a alguien lo he visto imposible por el hecho de que son demasiados recuerdos, demasiadas mierdas y putadas, por el hecho de que todo era muy bonito como para olvidarlo.. Y siempre he dicho que no es que no quisiera olvidar, es que no podía porque mi cabeza, mi corazón o yo qué coño sé, me recordaba siempre todo a ti.Pero la puta verdad es que no, que si no olvidamos es porque no queremos, porque cuando te empeñas verdaderamente en olvidar a alguien, lo consigues, cuando todo te supera y no te queda otra que dejar de hacer el gilipollas por alguien, dejas de hacerlo. Porque es eso, no es que no puedas es que no quieres. 
Es todo fuerza de voluntad. 
Y entonces es cuando abres los ojos, y te das cuenta de todas las mierdas que no habías visto porque tenías la venda, o tus manos.
[No culpemos a nadie de falsas esperanzas o mentiras, que nos habrán mentido miles de veces, pero nos lo hemos creído... quién es el culpable entonces.]
Cuando te das cuenta de todo, es cuando por fin olvidas.
Cuando ves que serán muchos recuerdos pero que te vienen mil más con gente que merece tu pena.
Cuando lo que viene son risas y alegrías por haber dejado de sufrir y en el pasado se quedan las movidas y putadas, que es donde deben estar.
Cuando ves que no todo era tan bonito como pensabas, o como decías.
'Desde fuera se ven putadas pero desde dentro yo lo pasaba bien con él, fue bonito', no sé cuantas veces habré dicho eso, creyéndolo incluso... no sé como no me habéis dado de hostias enserio.
No, si se ha acabado no sería tan feliz, si desde fuera se ven putadas no era tan bonito.
La verdad es que no es bonito que te utilicen pensando que tú estás enamorada y que posiblemente puedas tener una historia feliz que acaba siendo una puta mierda.
Y ya no te voy a llamar mentiroso porque la culpa la tengo yo, que no sé como he sido tan ingenua.
ya os digo que si no se olvida es porque no se quiere, que piensas que no es así, ya.. pero si lo es, no pretendemos olvidar algo que pensamos que ha sido bonito.
Pero quitate las manos de los ojos, las venda negra, y mira donde estás, mirate los pies.
Te estas hundiendo tú misma, tú sola, es una piscina, un lago o un mar, en arenas movedizas, pero sola, mira que el camino está lleno de piedras y siempre caes en la misma, mirate los pies y quita los cristales, que duele quitar recuerdos uno a uno, que sangras, es necesario para seguir adelante.
Mira, es bueno en parte, te haces fuerte.
Ya te has quitado cristales de las plantas de los pies, recuerdos del corazón y la cabeza, que duelen más, en la próxima hostia en una distinta piedra [por favor, cambia de piedra] ya no dolerá tanto el golpe.
Parece un libro sobre autoayuda, y no intento que sea eso.
No me siento tampoco nada especial teniendo estos pensamientos.
Me siento alguien que ha conseguido olvidar algo que llevaba meses intentando pensando que eso se pasa con el tiempo, y no. Si no te pones a ello, y no lo intentas no lo consigues.

Hace unas semanas soñé que mi tío, hombre que murió hace años y al que quiero muchísimo, se me aparecía y me decía que luchase por lo que quiero, pensé que significaba que luchara por la persona a la que quería, pero no.
Y me costó darme cuenta de lo que realmente significaba ese mensaje, que no creo que viniera del más allá, pero sí de mi misma, la yo de antes [la que piensa antes de actuar, y no como ahora que me he vuelto subnormal perdida.] Ese mensaje significaba que luchara por olvidar, que es lo que quería y necesitaba, que luchara por ser feliz, cosa que con cierta persona no se puede.
Y seguí luchando, ya no por él, si no por mí.
Seguí luchando hasta olvidar.
Cosa que he conseguido totalmente. Cosa de la que me siento muy orgullosa.

Y no veas, que bonito es olvidar, que bonito reconstruirse a si misma, a mejor, o peor, depende con quien. Todo depende de ti mismo, si quieres seguir sufriendo, o si quieres que tu sonrisa sea real.




                                              

                                     




Rot(ísim)a

<<'No te ilusiones chica, es igual con todas' y no se lo creyó, y mírala ahora... rota.>>





Menos feliz de lo que parece y más rota de lo que aparenta.


RE...



domingo, 8 de septiembre de 2013

Que bonito es olvidar

A, llamaré a esos ojos en los que me reflejaba.
B, a tu sonrisa por la que mataba.
R, a tus manos, por tantas misiones por mis piernas, mi espalda, y bueno.
I, al conjunto de tu sonrisa con la mía, al conjunto de labios, a los besos, a mordernos.
L, por último, y no menos importante, llamaré a lo que me hacías sentir, que es, 
   inexplicable.
   Las cosas pasan, tú y yo con ellas, más tú que yo. Pero ahora más yo, o a la par.
        Y mira, quizá es hora,
                        y momento.
   Quizá ahora sí y para siempre.
        Y ojalá.
   Y no sabes como me alegro.
                                                         Por fin.


                                              Hasta luego... adio.. qué coño, hasta nunca.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Algún día conseguiré entender el  por qué de todo esto,
el por qué todo tan complicado,
el por qué de complicarme
por qué esta mierda
por qué tú.



Me tenéis hasta los cojones con las frasecitas para subirme la autoestima, solo hacéis que piense que sois gilipollas y no sabéis lo que decís, no me llaméis negativa, soy realista, porque me tiene harta los 'va a volver, verás' 'cuando se canse de ella, vendrá a por ti' 'se dará cuenta de que tú le quieres' 'en el fondo siente por ti' 'te lo mereces, tarde o temprano estará contigo'.
Harta es poco.

No ayudéis, si no sabéis ayudar.

Recuerdos como 'instantáneas'

Estaba bien hasta que me ha venido ese puto recuerdo.
Bien, hasta imaginarme otra vez 
                                                      apoyada en el capó con él.
Bien...
hasta que me ha venido esa mierda.

Su recuerdo.

Él, viniendo de lejos, 
                           sonriendo como él solo sabe
escuchando música con los auriculares [música que no recuerdo...]
con esa chaqueta, y esos pantalones, 
y..bf. 

[Decir que estoy consiguiendo olvidarle cuando recuerdo la ropa que llevaba ese día de hace cinco meses... 
hasta  ..  ].

Se acerca, 

me mira, a los ojos... [no sé como me podía mirar fijamente a los ojos y sonreír, no sé como hacía para mentirme mirándome fijamente, ni como tenía la puta cara dura de seguir mirándome como el primer día, como si nada, después de todo].

Me besa, me pone el auricular [como queriendo dejar más recuerdos en mi para cuando se vaya, y recuerde la canción, me quede más jodida, o no.. no sé, yo qué sé... no sé qué coño estoy diciendo.]

Solo sé que me acabo de acordar, y la canción no la recuerdo.
...
Y pensaba que ya nada era como antes,
y bueno,
en cierto sentido es verdad.
Que sí, que por fin le estoy olvidando.
Pero si me vienen 
                            recuerdos como 'instantáneas' difícil es.

Olvidar no es fácil, todo lo contrario.

Pero es bonito cuando ves que lo estás consiguiendo o lo consigues.

Lo peor es que sea alguien el que te haga olvidar a otro...
y si se va esa persona que te hace olvidar...
o si esa persona que te hace olvidar no es la que debería hacerte sentir eso.


miércoles, 21 de agosto de 2013

Prometo que es la última vez que me meto a su perfil para ver si se ha conectado y una vez más no me ha contestado.
Prometo no volver a abrir su conversación de Whatsapp vacía, en la que ni está en línea,
ni estará,
ni estuvo.
Prometo no volver a abrir los mensajes para ver, si por casualidad, o por suerte, me ha contestado y no me ha salido la notificación.
Y prometer esto no me sirve de nada, porque en cualquier momento,
de cualquier noche solitaria,
con pensamientos locos,
de amor,
o
suicidas,
volveré a hacer todas estas gilipolleces.
Porque es lo que son.
Y estoy esperando demasiado y más, por alguien que me da nada y menos.
Por alguien que ya me jodió una vez,
y quién dice que no lo hará otra, u otras.
Pero decido seguir luchando a pesar de todo.
Luchando por nada, sin armas, ni argumentos.
Lo único que me sirve, es que te quiero.
Quizá es argumento de sobra para seguir aquí por ti.
Me gustaría también decir, ya que estoy,
que estoy harta de que me digáis que todo es posible,
que algún día conseguiré tenerle aquí a mi lado de nuevo.
Porque yo sé que no.
Y el único motivo de mi lucha, mis únicos argumentos, 
son que le quiero y su sonrisa.
Dicen que el que no lucha no gana...,
llevo luchando mucho, y perdiendo más aún,
diréis que el que ya no esté conmigo es una ganancia para mí,
que no ha sido bonito y que todo ha ido a mal.
Decís muchas tonterías.
Y es que ninguno de vosotros habéis visto mi sonrisa cuando está él a mi lado.
Y eso es motivo de sobra para quererle.
Es una dependencia de él, mala, o buena, ya creo que no sé decir.
Pero si tengo claro algo es que le quiero.
Sé, porque lo sé, y le conozco, que le va a costar,
que quizá si es verdad que quiere,
pero sabiendo cómo es, le va a costar.
Quién diría que quiere sentar la cabeza.
Puede que eso es lo que me joda,
puede que ese sea el motivo por el que cada vez la pared se lleva más puñetazos,
y mis nudillos sangran más de lo normal,
el motivo de mis lágrimas cada noche, 
cada tarde, y últimamente, cada mañana por los rincones.
El motivo de que todos y cada uno de mis amigos/as, los de verdad,
tengan que estar sacándome sonrisas continuamente.
Y no es que me joda que quiera sentar la cabeza,
la verdad es que de eso me alegro muchísimo.
Lo que me jode, es que no la siente conmigo.
Que la esté sentando con otra,
otra que se irá,
se acabará yendo, como todas.
Y es preciosa, y está muy bien, y puede que sea una tía genial en personalidad y corazón, no lo sé.
Pero lo que sí sé, es que no le quiere como yo, ni lo hará nunca,
nadie.
Espero que se dé cuenta, pero sé que aún no lo hará,
bueno, quizá nunca...
Y claro que prefiero que siente la cabeza conmigo antes que con ninguna otra,
y no tengo nada contra ella ni contra nadie.
Pero ya que lo va a intentar, que sea feliz, que aún viendo su sonrisa a metros de mí, o aún en fotos,
solo sabiendo que él está bien... yo seré feliz, y yo estaré bien,
aunque podría estar mejor.
Y realmente creo, que es la primera vez que escribo verdaderamente todo lo que pienso y consigo desahogarme.
...
Me gustaría prometer que voy a dejar de escribirle, y que voy a rehacer mi vida pensando que no existe.
Pero como todas las promesas del principio, las acabaré incumpliendo.
No soy de cumplir promesas.
Solo he cumplido una en toda mi vida, la de que le voy a querer siempre, y ojalá pudiera incumplirla, pero es la única que no puedo.

Todo.

Vuela,
vuela,
vuela conmigo,
cuelate dentro dime chico,
dame calor, sácame brillo,
hazme el amor en nuestro nido.
No quiero nada,
nada más.
Me sobra respirar,
sube, sube,
sube conmigo.
Déjalo todo, yo te cuido.
Ven a Madrid ten un descuido,
haz cosas mientras yo te miro.
No tengo miedos,
no tengo dudas,
lo tengo muy claro ya...
Todo es tan de verdad,
que me acojono cuando pienso, en tus pequeñas dudas y eso, que si no te tengo reviento,
quiero hacértelo muy lento..
Todo,
todo,
todo,
todo,
yo quiero contigo todo.
Poco, muy poco a poco,
poco,
que venga la magia y estemos solos,
solos, solos,
solos.
Yo quiero contigo, solo.
Solo, rozándonos todos, 
sudando,
cachondos,
volviéndonos locos,
teniendo cachorros,
clavarnos los ojos, 
bebernos a morro.
Sueña, sueña,
sueña conmigo, 
escríbeme luego un mensajito,
dime hacia donde y yo te sigo,
si tú te tiras,
yo me tiro.
[...]
Dame que aun te queda,
dame un poco más,
dame que lo quiero todo,
siento que cada vez más tengo celos de todo,
dame que aun te llega,
y todo llegará.
Cada vez quiero más...
Vuela,
vuela,
vuela conmigo,
cuelate dentro dime chico,
dame calor, sácame brillo,
hazme el amor en nuestro nido.
...
- Pereza.




Mil suspiros en ausencias que te echan de menos.

Me hubiera conformado con un 'lo siento' o un 'perdón',
sincero.
Porque para mentiras las que llevo aguantando meses. 
[Creo que tampoco pido tanto...]
Querría odiarte,
y quizá debería,
y puede que si haya algo de odio aquí, 
no sé donde, pero por ahí estará, 
escondido en tus 
           recuerdos, 
o por las calles en las que nos dimos todo, [sin darnos nada..]
o en las iniciales marcadas en la barandilla.

Pero siempre es más grande el amor que siento por ti.
Las mariposas, 
el zoo en mi estomago tan solo al ver tus pupilas, 
tus iris ['cualquiera']
tus piernas,
tus manos,
a metros.
Y no veo una puta mierda de lejos,
y a ti te distingo en cualquier sitio.
Cómo no distinguirte...
He venido aquí a olvidarte,
           y
lo estaba haciendo,
lo estaba consiguiendo,
tenía mi vida preparada para no volverte a sentir,

y llegaste,

con esos ojos y esa sonrisa,

diciéndolo todo con la mirada,
matándome a risas.

Volver a empezar de cero, otra vez.
Y vuelve a ser intento fallido,
intento a la mierda.

Uno más, de mil.

Mil,
como las horas que te he pensado,
o como las lagrimas que he derrochado por ti.
Mil, como los besos que te daría,
o como los abrazos que me debes.
Mil perdones, mil 'lo siento'.
Mil miradas sin sentido.
Mil sonrisas al horizonte, 
pensándote.

No intentéis entenderme,
no intentéis entender algo que no vais a conseguir.
Ya que si no me entiendo yo,
dudo que lo vayáis a hacer vosotros.

martes, 20 de agosto de 2013

Con 's' de suicida, o de segundas oportunidades.

Me quedo mirando ese edificio...
Que alto es...
Y pienso... 

"Que bien estaría tirarse desde ahí, directa, cabeza contra el suelo, en el mismo momento en el que pase un coche,
o sin coche,
matarme,
joder,
morir."

Y sólo me viene eso a la mente.
Sigo andando por aquella calle.
Aquella calle en la que no hemos vivido nada,
pero podríamos.
Y voy, voy hacia recuerdos,
hacia calles con historias,
con besos,
los nuestros,
y abrazos...

Y me haces falta
     hoy,
          ayer,
               y mañana,
                      y así ya cinco meses...

Sigo andando por las calles, con pensamiento suicida,
 con tus besos de recuerdos, que recordarlos y no vivirlos
son la muerte.

¿Realmente quiero vivir otro día igual?

Pensándote de ésta forma tan inhumana,
con este sufrimiento suicida, pensando que en el próximo coche, en el próximo capo
me quedo.
Y que todo es mejor que no tenerte.
Si me he quedado estancada en ti... Y si necesito de esos abrazos...
De esos besos o simplemente de esas palabras...
He sido muy tonta,
he dado mi vida por imbéciles.
Pero si de algo no me arrepiento y sé que no me voy a arrepentir es,
de romperme por segunda vez por un cabrón.

Será muchas cosas,
(y yo muchas mas), pero aún teniendo este pensamiento
suicida..
(que es lo que más me hace darme cuenta),
si de algo estoy totalmente segura,
es de que te quiero,
y daría la vida,

por ti.
Imbécil, joder, echarte de menos es peor que tirarse desde un edificio hasta la carretera.
Imbécil, mierda, te amo.
Y ahora lo veo todo más seguro y posible, pero estoy volviendo a caer
y no sé si en tu juego, o del edificio.
Quiero una segunda oportunidad, y la veo medio que,
 y ojalá,
todo perfecto
          contigo,
por favor.

Y no me juzguéis por todas las tonterías que digo,
esto es escrito de noche,
y en estás situaciones,
y a estas horas,
y encima,
tú en mi cabeza,
no soy persona.
Que no sé ni lo que digo, no tengo ni puta idea,
pero te quiero a mi lado, y eso si lo tengo claro.

(Te) quiero, segundas oportunidades.

Nunca van mal...
y menos si es por mirarme en esas pupilas y reflejarme en esos iris.

lunes, 12 de agosto de 2013

Cuando algo es irrepetible, hay que respirarlo.

Volver allí...
Tengo la sensación de que no me va a traer nada bueno.
Pero, como siempre, los cambios traen solapadas emociones. 
Y, sin saberlo, yo necesito una emoción. 
Tan sólo eso, una emoción.

Hace frío allí...
Recuerdo que pasé mis mejores momentos, y también los peores, o al menos, ahora lo recuerdo así.
Me observa.
Tardo en poner un pie en aquella tierra. No estoy segura de si esto es buena idea.
Llego sin nada, sin maleta, sin objetos, sin mi mundo...
Todas mis cosas están a kilómetros de allí, y yo no sé realmente que estoy haciendo.
Dependiendo del primer nuevo encuentro decidiré si realmente hacer lo que se me había pasado por la mente y de lo que no estaba nada segura.
Él me sigue observando... su rostro no refleja ninguna emoción... 
Tan sólo me mira desde el portal.
Nunca había imaginado peor recibimiento que ese, supongo que tampoco le agrada mi vuelta, pero imagino que es consciente de lo que necesito.
(Peor recibimiento si ha habido, la verdad... el que hubo..., el que le hice yo a él cuando decidió volver..., 
pero se lo tenía merecido...)
Pongo pie en esa tierra por fin, él se aleja.
Es como si tuviera miedo a mis preguntas... pero yo tengo pánico a sus respuestas.
No estoy nada segura de lo que estoy haciendo, 
es algo inconsciente que necesito...
Las dos mujeres de mi vida ya no están  y me habían contado muchas cosas, pero yo necesito las respuestas de la persona indicada, de la persona que nunca ha estado, y necesito el por qué verdadero, 
con su versión.
Nada más llego recuerdo los tiempos en los que en cuanto le veía corría hacía él y le saltaba encima...
Llego hacía él, estamos a muy poco de distancia, y sólo mirarle,
me dice 'hola' y agacho la cabeza como buscando en mi mente la palabra exacta para saludarle, aunque solo me salen expresiones de odio,
Demasiado tiempo sin vernos y sin hablar, y lo primero que me dices es hola....  -le digo con cierto descaro-.
Su siguiente frase es informarme de que está enfermo.
La verdad, no sé si quería saber eso.
Supongo que entre cuidar de un extraño o de alguien de tu propia sangre, la decisión es fácil y clara...
En mi caso no tanto.

La mujer de mi vida me avisó varias veces que esto podría pasar, y siempre dije que no lo haría, pero necesito respuestas, y saber varias cosas, así que si tengo que cuidar de la persona que jamás se preocupó por mi, lo haré, simplemente por saber el por qué de no importarle jamás.

Me habla sobre su enfermedad, sobre medicamentos y todas esas cosas, y yo solo pienso en las millones de preguntas que tengo que hacerle, llevo años esperando este momento.
Egoísta quizá, pero nunca más que él, además jamás he sabido hacer dos cosas a la vez triunfando en ambas, así que prefiero pensar todo lo que le tengo que decir, bien y claro.

Me sigue observando con mucha delicadeza.
Diría que el rostro de extrañeza hacía mí va aumentando a la vez que yo tengo cada vez las cosas más claras pero las preguntas más revueltas...

Necesito hablar con él, saber todo lo que necesita y si hace falta ayudarle, aún que realmente no se merece nada.
Esto lo hago por mí.
Enfrentarme a él, es algo que necesito hacer desde hace tiempo.
Sube mientras yo le sigo.

Subir aquella escalera por la que tanto me había caído y por la que tantas veces me habían reñido por saltar y caerme, significa demasiado, y no tendría que significar nada.
Me marché de allí hace demasiado tiempo, años. 
Por no volver a verle a él, ni a nadie de allí, aún que la verdadera culpa de todo la tuviera siempre él.
Y lo conseguí.
Pero durante años también he sentido que cada uno de mis logros personales me ha llevado más lejos de mis raíces... Lejos de aquella casa llamada 'hogar'.
Odio volver, pero necesitaba hacerlo, necesito billones de respuestas.

Subo arrepintiéndome... 

Al entrar, es increíble que ese olor siga aquí, todo sigue igual.
Esas fotos de familia en la pared, esa cocina chiquitita con todas sus cosas perfectas, los cuartos perfectamente arreglados, todo completamente impecable.
Es extraño, él no es así, alguien debería haberlo ayudado a hacer todo este trabajo, o haberlo hecho por él... o quiere impresionarme o mostrarme que se esta volviendo loco.

Y de repente, él cae al suelo.
Me quedo en shock, solo pienso en qué hacer, y en por qué esto ahora.
Llamo a una ambulancia y vamos hacía el hospital.

Había tenido un infarto, y tenía no sé qué mierda en el corazón, por su enfermedad que no pude preguntarle cuál era, 
que le quedaba poco tiempo de vida.

Y era el destino, allí había llegado yo, justa de tiempo.


Por fin despierta.


Yo, sentada al lado de su cama, me quedo mirándole fijamente, con ganas de decirlo todo, pero sin decir nada, y me doy cuenta de que tengo que hacerlo cuanto antes, porque en este caso no vale la frase de 'mejor tarde que nunca', le queda poco y cuando se vaya se habrá ido para siempre.

Hola cariño -me dice-.

Yo, no sé que contestar, a qué viene ese cariño después de tantísimos años...
Bueno, está muriendo.. soy su hija, que menos...

Hola Jesús... necesito que hablemos, necesito muchas cosas. 
Por favor, dime que no te vas a ir aún. -me sale sólo decirle todo esto, necesito sincerarme con él-.
Sabes que no cumplo mis promesas, pero dime que quieres saber y contestaré a todo. -dice descarado, realmente, muy sincero-.

Me quedo mirándole, y veo como me sonríe débil.
Pienso que en cierto sentido me alegro de estar aquí para verle morir, porque nadie merece morir sólo por mucho daño que haya hecho...
Siempre le he querido mucho, por mucho odio u rencor que tenga hacía él, y eso esta claro.
Siempre aún que no estuviera a mi lado durante gran parte de mi vida, siempre he sido su ojo derecho, y el izquierdo, y sus dos manos, y su palo de golf, y el zumito de piña o melocotón en el Miño, su cerveza, su pensión, sus almendras, su gota de agua, 
su mitad.

Y es que siempre me habían dicho que yo he salido clavada a él, y jamás he querido ser como esa persona.
Ha hecho mucho daño a mucha gente.
Y sentía rencor por eso.
Pero, pensándolo bien... siempre, cuando ha estado conmigo, siempre ha sido genial.

No quiero torturarle, no quiero saber nada de su vida mientras no ha estado a mi lado,
no quiero respuestas de ningún tipo que en cierto sentido no tienen que ver conmigo.

He venido buscando respuestas, más preguntas, y volverme más sin él de lo que estaba.
Y prefiero quedarme sin saber nada, abrazando a la persona que nunca ha estado físicamente a mi lado, pero que me necesita, y sin él yo no sería lo que soy hoy.
La única vez en la vida en lo que no siento absolutamente nada de rencor.
Pero yo he venido aquí por algo, y aún que sea lo más mínimo necesito hablarlo con él.

Decido sincerarme.

Oye, Jesús... siempre te he echado de menos, me he tirado noches, días, mucho tiempo llorando por ti. Nunca has estado realmente. Un par de llamadas al mes no han sido suficientes, vivir contigo un año, jugar al golf cada tarde desde que tenía 6 años hasta los 10 de lunes a domingo durante algún mes que venías. Esos creeps o gofres, o que me compraras juguetes. No. Todas esas cosas no las he querido nunca.
Ahora si me apetecen ¿sabes? Cada vez te echo más de menos por mucho que diga que no.
Pero lo que realmente siempre he necesitado era un padre, no un amigo de 40 años más que yo que iba y venía y me invitaba a cosas.
No. Joder, un padre, que me enseñara a montar en bici, al que decir la primera palabra, que se cabreara porque tengo novio solo porque soy su niña y quiere protegerme.
Y no es rencor, ni quiero hacerte daño con todo esto, pero antes de que te vayas para siempre, necesitaba contarte todo lo que pienso.
Y necesitaba decirte que a pesar de esto siempre te he echado de menos y siempre has sido importante para mí.

Joder, que agusto me quedo diciéndole todo, se ha quedado estupefacto, con ganas de contestar, pero como pensando las palabras correctas para no sembrar rencor en mí en su último momento de vida.

Tú primera palabra fue papá, eso es bueno...
Y siempre he querido volver, pero he hecho demasiadas estupideces como para reaccionar como si nada delante de todo el mundo. Ya sabes que no podía pasar mucho tiempo allí ya que todo fue a mal, y yo allí no pintaba nada. Pero te vuelvo a pedir perdón como muchas más veces he hecho. Y si no hubiera sido por ti, no hubiera aparecido por allí jamás pequeña mía...-dice tranquilo, pero midiendo las palabras-.

No, no es bueno cuando le digo papá a un hombre amigo de mi abuelo.
Joder, Jesús... sé que te arrepientes, y mira... bf, no sé que más decirte y... -empiezo a llorar desconsoladamente.-

Me toca el hombro, me sonríe, cierra los ojos, respira fuerte, y me dice,

'Todo va a salir bien pequeña, eres quien eres gracias a todas las experiencias, y está es grande, y tú eres fuerte, llora todo lo que necesites, pero estás más preciosa sonriendo.
Cariño, por favor, no me llames Jesús, me rompes en pedazos...'

Entonces, 
decidí decirle algo que no decía de hace años, 
algo que no pensaba volver a decir nunca, 
algo, 
que me salió completamente sólo.

Oye, papá, te quiero...

Me acerco a él, le doy un beso en la mejilla, le abrazo...


y ya se ha ido.





'..buscando.'

"Y si los que mueren... Han descubierto una verdad...
Una verdad sobre el amor, sobre la amistad, sobre ellos... 
Y nosotros somos ignorantes...
Quizá es ése el sentido de ésta vida, 
todos somos ignorantes que ignoramos cosas diferentes hasta que desaparecemos...
El conocer la verdad nos permite marchar...
¿No podría ser así?"

"Brújulas" ...

Traumas de la infancia, al fin y al cabo es lo que somos cada uno de nosotros,
traumas de la infancia...
Jamás pensé que fuera una promesa,
tan solo pronuncie una frase...
Pensé que no la cumpliría,
él no se merecía que yo volviese,
pero cuando llegó el momento, 
regresé.
Mi vida era extraña... O al menos yo sentía que lo era...
¿Sabéis cuando los días
y
las noches se confunden?
¿Cuando te metes en la cama y tienes la sensación de que es imposible que haya pasado otro día más?
Eso me ocurría noche tras noche, 
día tras día. 
Sentía que aquello no era vivir,
era tan sólo notar cómo el tiempo transcurría alrededor de mis biorritmos...
el tiempo fluía tan rápido que tenía la sensación de que un día la muerte
me alcanzaría...
Pero no llegaba...
Era tan sólo una sensación...
Mi vida no era fácil... 
Habían pasado demasiadas cosas en poco tiempo...
Sentía...
Sentía que no pertenecía al lugar donde estaba,
que no me gustaban las costumbres
y es que tenía ganas de hacer algo diferente....
Y sabía que había tiempo...
Y bueno, pf...
Siempre que miro esas fotos, 
descubro que 
todo era mejor de lo que yo creía...
No me siento especial por tener estas reflexiones,
supongo que igual que los demás,
todos tenemos en esta vida un momento en el que nos sentimos desconcertados con todo...
Me sentía mucho más cómoda de la otra forma de vivir que tenía,
pero me cambiaste, 
cambié.

sábado, 10 de agosto de 2013

Hay diez centímetros 
de silencio 
 entre tus manos y mis manos
una frontera de palabras 
no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla 
así de triste 
entre tus ojos y mis ojos.
Volví a casa sintiéndome sola, y tú ya no estabas aquí,
y lo que dicen de que la soledad nunca viene sola...
Viene con tu ausencia,
y no sé que es peor.

Y no sé ni lo que digo, pero tengo bien claro por quien(es) va, y esto es grande

Oye, y escúchame, y hazme caso cuando te digo que te estas convirtiendo en alguien verdaderamente importante.
Y es preocupante.
Porque hacía tiempo que había dejado de confiar en alguien, y menos de esta forma,
hacía tiempo que solo quería besar unos labios que 
tú, 
me has hecho olvidar y has hecho que ese deseo por unos labios mentirosos, se reemplacen a querer los tuyos.
Y gracias.
No sé como me siento ahora mismo, 
porque siento demasiado, 
y no sé de qué forma.
Y es amor hacía una persona que no está, 
es la ausencia que noto,
que mata.
Es algo nuevo que viene, que me gusta, y ésta sensación es la mejor, 
pero claro,
por otra parte está esa gran ausencia que viene cuando quiere y se pira cuando le da.
Y podréis decirme mil y una cosas sobre las ausencias de amigos, amigas, familia, o simplemente, y claramente, 
tíos que marcan.
Pero jamás llegaréis a entender mi situación.
Mi espera a unos ojos, a unos iris, y a unas pupilas que mentían más que las palabras de su boca.
Y vuelvo a repetir, 
demasiadas gilipolleces por un gilipollas.
Después estás tú, 
que claro...
Me haces olvidar el presente con tus miradas, 
el pasado con tus sonrisas,
y me haces imaginar el futuro con tus abrazos.
Y olvido quien soy simplemente cuando me tocas,
y mira, 
¿ves esa pared?, 
no sigas sonriendo de esa forma tan tuya 
o acabamos ahí haciéndolo.
Yo no soy así, y te flipa en lo que me he convertido,
en lo que me convierte la mezcla entre su ausencia y tú.
Y ser una hija de puta con todos, porque él me enseñó a serlo,
y que contigo no, y es por algo.
Enserio, por favor, mírame otra vez así, vamonos de aquí,
y abrázame.

Dime que me quieres ya, ven a mi portal, te estoy esperando después de todo,
vamonos.

Te echo de menos,                      y hace horas,

y en horas.

'Un camino para recordar' .. (y recordando tu sonrisa en cada instante)